El superlujo no entiende de crisis.
Nueva York, París, Londres... ciudades turísticas en cuyas enclaves más exclusivos no existe la palabra crisis. En España, lo más lujosos entre lo más exclusivo también ha sobrellevado mejor la atonía del mercado. Las zonas costeras como Marbella, y algo menos Ibiza y Palma de Mallorca, se han beneficiado del inversor internacional. Por encima de los tres millones de euros, “el mercado ha sufrido la crisis en mucho menor medida tanto en cuanto a los descensos de precios registrados, como los ritmos de venta y la demanda de viviendas”, explica María Monasterio, directora de la agencia Málaga-Andalucía de Aguirre Newman.
leer en
CincoDías