Bueeeeeno, hoy nos levantamos con buenas noticias... ahora tendremos que esperar si es algo real o más bien unas declaraciones de cara a la galería ante la investigación de la CNC.
A ver esas apuestas ¿quién va a ser el primero en mover ficha?? ING, Coinc?????????
El confidencial
El Banco de España ha dado marcha atrás en la imposición de un tope a la remuneración de los depósitos de principios de año. Ha hecho una ronda de llamadas entre las entidades financieras en las que ha reconocido que cometió un "exceso de celo" y ha añadido que no impondrá sanciones a los incumplidores, porque sería difícil de justificar al tratarse de una mera recomendación y no de una norma. No obstante, nadie piensa saltarse estos topes, al menos entre las entidades relevantes del mercado español. Según fuentes al tanto de la situación, esta marcha atrás tiene detrás la investigación abierta sobre este asunto por la Comisión Nacional de la Competencia (CNC).
Una de las fuentes consultadas explica que sería difícil justificar las sanciones cuando no hay una norma escrita que las sustente. En efecto, el tope a los depósitos fue una recomendación transmitida de forma informal a las distintas entidades, pero que establecía unos límites estrictos a los tipos de interés que podían pagarse en cada plazo, y unas sanciones en forma de requisitos adicionales de capital para los que los superasen. Ese régimen sancionador es el que ahora desaparece para que no se pueda acusar al Banco de España ni al sector de prácticas limitadoras de la competencia.
Ahora bien, el Banco de España se reserva su papel de supervisor prudencial, por lo que, si la remuneración excesiva de los depósitos pone en peligro la solvencia de una entidad, le exigirá una aportación adicional de capital. Este es el espíritu de la directriz lanzada por el gobernador, Luis Linde, en los primeros días del año, y sigue vigente aunque desaparezca el régimen sancionador como tal.
Ésa era la razón de ser de esta limitación, que pretendía evitar que la llamada guerra del pasivo pusiera en riesgo la solvencia de algunas entidades -en especial las nacionalizadas- y que eso provocara la necesidad de una mayor inyección de recursos públicos en el sector. Según distintas fuentes, los representantes del Banco de España explicaron al sector que "si hacéis una política generalizada de extratipos, os estáis cargando el margen y, por tanto, poniendo en peligro la solvencia". Y eso es algo que no quieren ni imaginar en el caserón de Cibeles después de haber tenido que pedir a la UE casi 40.000 millones para rescatar el sector, asumir unas duras condiciones a cambio y crear el banco malo (Sareb) para sanear las entidades con mayores problemas.
En todo caso, otra de las fuentes asegura que no hace falta que se impongan sanciones "porque nadie va a saltarse estos límites, al menos entre las entidades con cierto peso. No hay nadie en la banca que se atreva a ignorar una directriz del Banco de España, por mucho que sea informal". Linde prefirió no hacer una circular sino limitarse a una recomendación informal a las entidades.
Esta directriz establecía que aquellas entidades que ofrecieran más del 15% de sus nuevos depósitos a un año con un tipo superior al 1,75% (el tipo oficial del BCE más un 1%) tendrían una exigencia de capital de 0,75 puntos adicionales al 9% legal en términos de EBA. Este tope sería del 2,25% para los productos entre uno y dos años, y del 2,75% para los que tengan un plazo superior. El requisito extra de capital podía llegar a 1,25 puntos en función del exceso de depósitos de alta remuneración respecto a ese tope del 15%. Estos máximos también se aplicaban a las cuentas corrientes y a los pagarés.
Competencia provoca la marcha atrás
La marcha atrás de Banco de España tiene detrás el inicio de una investigación por parte de la CNC sobre una posible concertación de precios entre la entidades y el propio supervisor en los depósitos, según las fuentes. Ante esta amenaza, que podría desembocar en un expediente sancionador, Linde ha preferido dar un paso atrás, reconocer que se extralimitó y eliminar las posibles sanciones al sector. Era muy dudoso que, sin una norma escrita, se pudieran imponer sanciones a las entidades incumplidoras.
Otra versión que circulaba por el sector aseguraba que Linde pretendía reactivar el crédito a las pymes con el tope a los depósitos, en respuesta a la petición de Economía en este sentido. La teoría era que hay muchas pymes que podrían acceder al crédito por su perfil de riesgo pero no lo hacen porque los tipos de los préstamos son altísimos. Pero si se reduce el coste del pasivo de los bancos con esta limitación a los depósitos, podrán trasladar esta rebaja al crédito, y entonces éste podrá volver a fluir.
Los analistas coincidieron en enero en que el más beneficiado será Popular, porque tiene los depósitos más caros y porque su eficiencia hace que la rebaja de los mismos tenga mayor impacto en resultados: N+1 espera una mejora de su beneficio antes de provisiones del 25% gracias a esta medida. Sabadell, Bankinter y La Caixa verán también crecimientos superiores al 20%.